Este plato podía estar algo mejor si cambiamos el tipo de carne, pero en casa, aunque sea menos sabrosa que el muslo o el pollo entero troceado con sus huesos, les gusta la pechuga, así que..... pechuga.
Ingredientes: 5 personas
Una pechuga de pollo troceada
sal, pimienta, vino y aceite de oliva virgen extra.
Para la salsa:
Una cebolla mediana
Un diente de ajo
10-12 almendras crudas
2-3 rebanadas de pan
vino, agua.
Elaboración:
Cortamos el pollo, si no nos lo han dado así en la carnicería, en trozos pequeños.
En una sartén con 4-5 cucharadas de aceite, que previamente habremos puesto a calentar, incorporamos a la sartén el pollo, salpimentamos y esperamos que vaya dorándose lentamente, a los pocos minutos de empezar a cocinar el pollo añadimos unos 100 cc de vino blanco, esperamos que reduzca y se dore el pollo un poco. Cuando suceda esto, apartamos y reservamos.
En la misma cacerola o sartén vamos a preparar los ingredientes de la salsa.
Si es necesario añadimos un poquito de aceite, previamente habremos cortado en juliana muy fina la cebolla y el ajo. Esperamos que dore, no se debe pasar, ya que amargaría. Cuando esté. lo vaciamos en el vaso de la batidora.
Ahora también con mucho cuidado de que no se quemen echamos las almendras y doramos también, una vez que se tuesten un poco, las ponemos con la cebolla. Por último pasamos por la sartén las rebanadas de pan hasta que estén fritas, las añadimos al vaso con la cebolla y las almendras, añadimos un poco de agua y batimos hasta conseguir una salsa, probamos y si es necesario rectificamos de sal.
Colocamos de nuevo el pollo en la sartén y vertemos la salsa sobre él.
Si es necesario aclararla un poco, podemos añadir un chorreón de vino blanco y llevamos otra vez a ebullición hasta evaporar el alcohol.
Si queremos darle un poco de color podemos añadirle un poco de azafrán en hebra al echarle el vino.
Nos pasamos por la panadería, compramos una buena barra de pan y servimos, no os vais a poder resistir, hay que mojar.
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